La doble avenida Julio César Riquelme del barrio Ciudad Nueva, es una de las más importantes del municipio, ya que pertenece a uno de los barrios más populosos de la zona. El tránsito sobre la misma es intenso. Actualmente este tramo que une a importantes avenidas como San José y Calle 2000, al igual que a la ruta PY 02, se encuentra en un estado deplorable, con zonas irregulares llenas de baches y desniveles que ponen en riesgo la seguridad de los conductores.
La avenida había sido parte de un proyecto de reacondicionamiento entre los años 2015 y 2016, requiriendo una inversión inicial de G. 1.400 millones, bajo la administración del entonces gobernador Nelson Aguinagalde. En la época la obra fue apoyada por los frentistas, quienes se mostraron bastante entusiasmados con el proyecto, pero al poco tiempo fue muy cuestionada no sólo por el atraso en el inicio de los trabajos, sino también por la diferencia del plan presentado con lo que se hizo.
El proyecto contemplaba en total unos 500 metros, iniciando en la ruta PY 02 2 hasta las inmediaciones de la seccional colorada, con el ensanchamiento del asfalto para la creación de estacionamientos, el mejoramiento del paseo central, además de trabajos de hermoseamiento, incluyendo jardinería, bancos para el descanso, basureros y el ordenamiento completo, con atractivos que conviertan a la zona en un lugar de esparcimiento y recreación.
Desde ese entonces, todo el trayecto comprendido en el proyecto quedó con serios defectos en el asfalto, con grietas y desniveles acentuados, que desaparecen al entrar en el tramo original que no fue “tocado”. El paseo central fue reducido a poco más de un metro, poniendo en riesgo a quienes desean cruzar de un lado al otro. Hace varios años se encuentra prácticamente abandonado, al igual que los estacionamientos, cuyos cordones están totalmente destruidos, acumulando escombros, entorpeciendo y arriesgando a los peatones.
La avenida no recibe ningún tipo de mejoramiento desde ese entonces, pese a ser un tramo bastante utilizado y ser ala fundamental del viaducto del km 7. Ni siquiera una capa asfáltica fue colocada en más de 10 años y el deterioro es más que notorio.
Si bien los frentistas se mostraron reacios a dar un testimonio oficial a nuestro medio, indicaron que esperan que la municipalidad o el gobierno departamental hagan algún tipo de mejoras en el lugar, ya que a diario sus clientes se quejan de las malas condiciones, principalmente del asfalto, que empeora considerablemente en los días de lluvia.
El mega proyecto se extendía hasta la intersección con la avenida San José, pero literalmente “quedó por el camino”, ya que requeriría una inversión superior a los G. 2.400 millones. Incluso fueron presentadas denuncias por la falta de estudio real del área y de impacto ambiental. En su momento los comerciantes de la zona aseguraron que varios árboles se vinieron abajo por carecer de tierra donde sostenerse, atendiendo la gran reducción realizada en el paseo central.
En la actualidad, el tramo en cuestión cuenta con unos 16 alumbrados públicos dobles, de los cuales, más de la mitad no funcionan o lo hacen a medias. La falta de iluminación en el lugar no se reciente mucho gracias a la buena luminaria de los locales comerciales, que de no existir, estarían sumidos en una absoluta oscuridad.