Ayer a la mañana el edil Lucio Vera (PLRA) asumió de vuelta como nuevo presidente de la Junta Municipal de Presidente Franco. El mismo es considerado servil al intendente Roque Godoy, también liberal. El pasado 1 de diciembre se llevó a cabo la elección de la mesa directiva, donde ganó Vera, desplazando al joven concejal Luis Fernando Vargas, del mismo signo político de Godoy, pero muy crítico a su administración.
Esta sería la razón fundamental por la que Vargas no fue electo para presidir la mesa directiva de la corporación legislativa franqueña; a diferencia de Vera, quien es totalmente pusilánime al administrador comunal y fue premiado por sus pares obsecuentes para estar al frente de la Junta Municipal de Presidente Franco.
Luis Fernando Vargas viene cuestionando fuertemente la administración de Godoy, caracterizada por denuncias de supuestos hechos de corrupción, atraso de salarios de funcionarios y de inutilidad, debido a que no hace nada por la ciudad que se cae a pedazos. En cambio, la postura servil de Vera lo ayudó a llegar a la presidencia de la mesa directiva de la corporación legislativa, de la mano de los colorados.
Al observar favorable el escenario político para el mismo, Vera y sus aliados políticos llevaron a cabo la elección de cambio de autoridades de la mesa directiva el pasado 1 de diciembre, donde igualmente se postuló Vargas para el mismo cargo. La corporación legislativa franqueña está compuesta por 6 colorados y 6 liberales, por lo que en cualquiera de los casos, el pacto azulgrana deberá prevalecer a los efectos que uno de los dos bandos se quede con la principal administración de la mesa directiva de dicho cuerpo colegiado.
El resultado de la puja eleccionaria vivida en el cuerpo colegiado, demuestra que existe una clara división, tanto entre los colorados como entre los liberales, debido al fuerte internismo existente, producto de los sangrientos comicios que se suelen desarrollar tanto en el PLRA como en la ANR.
Para dar gobernabilidad al intendente Roque Godoy, obligatoriamente un grupo de liberales se alió a otro grupo de colorados, por esa “armonía” que buscan permanentemente, aunque resulte con un muy alto costo para Godoy. Es evidente que la mano del administrador comunal estuvo metida en estas elecciones. Godoy fue muy criticado por Vargas y por parte de otros correligionarios suyos que no comulgan con su forma de administrar la ciudad.
De este modo, Godoy tiene nuevamente un aliado en la Junta Municipal, que no solo está dispuesto a defenderlo, sino a acompañarlo hasta la puerta del cementerio, como se dice en términos políticos. Con este escenario, Vargas prácticamente quedó solo, ya que los que deberían hacer oposición al jefe comunal deberían ser los colorados; que al igual que Vera también están arrodillados al intendente. En la vicepresidencia fue electa Blanca Acuña (ANR), también aliada de Roque Godoy.
