Vecinos del barrio San Juan de Ciudad del Este, cansados del acecho de los delincuentes y adictos a las drogas, se manifestaron frente a la subcomisaría 46 para exigir mayor acción de las autoridades para combatir el flagelo. Los lugareños mencionaron que en cada cuadra abundan los locales de ventas de drogas, propiciando la inseguridad y la intranquilidad de todos los ciudadanos de bien, que ya no pueden ni caminar tranquilos porque son víctimas de los bandidos.
El reclamo ciudadano fue escuchado por el director de Policía del Alto Paraná, el Crio. Gral. Feliciano Martínez, quien ordenó un fuerte operativo que reunió a varias fuerzas policiales de la capital departamental, logrando la detención de una decena de personas prófugas de la justicia y distribuidores de drogas que tenían una importante cantidad de estupefacientes.
Los uniformados realizaron un rastrillaje en inmediaciones de la costanera Ñande Renda, donde pudieron aprehender a diez personas bajo sospechas de la comisión de hechos punibles que incluyen desde delitos menores hasta crímenes, como intento de parricidio y tráfico de drogas.
En la redada policial fueron detenidos Milciades Martínez Román (19), con antecedentes y una orden de captura pendiente; César Claridge González (39), con antecedentes y orden de captura; Marcelo Galeano Giménez (22), supuesto autor de un intento de parricidio; Edgar David Molinas Ortiz (22), Alexis Daniel Mercado Méndez (18), Marcos Pereira Dos Santos (31), Eduardo Leiva Esquivel (27), Fredy Osvaldo González Bogado (41) con antecedentes por robo y hurto agravado. También Hugo Ramón Guzmán Mendieta (41) y Francisco Ezequiel Báez Heine (25), en cuyo poder fueron encontrados 898,8 gramos de marihuana que trasladaban en una bolsa de polietileno.
El fiscal de la unidad lucha contra el narcotráfico, Elvio Aguilera, dispuso que ambos sean detenidos y trasladados a la dirección policial y las evidencias sean remitidas a su oficina. Con relación a las personas con cuentas pendientes con la justicia se notificó al Juzgado Penal de Garantías sobre las detenciones.
TERRITORIO DEL MICROTRÁFICO
Uno de los vecinos mencionó al diario Vanguardia que los distribuidores recorren el barrio las 24 horas, vendiendo las dosis a plena luz del día en las narices de las autoridades, quienes hacen caso omiso a los llamados que realizan a la sede policial. Agregó que los consumidores deambulan por las calles amenazando y poniendo en peligro a todos los que circulan por la vía pública. Los pobladores criticaron duramente a los agentes de la subcomisaria local, porque supuestamente solo realizan controles a las personas trabajadoras y no persiguen a los delincuentes.
