Un oriental condenado por violencia familiar trató de despojar a su ex esposa de la vivienda y fue denunciado por simulación de acto jurídico. Además cuenta con proceso pendiente por abuso sexual en niños. Se trata del surcoreano Jin Sek Baig. El extranjero mantuvo prácticamente en cautiverio a su esposa por casi 20 años.
El coreano fue denunciado y condenado por violencia familiar a cumplir la pena de 3 años y 6 meses de privación de libertad. Desde el inicio del proceso tenía prohibido acercarse a la casa donde vive su ex esposa, en el barrio San José de Ciudad del Este. Sin embargo, el hombre simuló la venta de la propiedad y su hermano Jin Man Baig aparece como nuevo propietario, que de inmediato trató de desalojar a su ex cuñada.
La afectada está identificada como Sonia Raquel Aguilar Olmedo. De inmediato se planteó un juicio por simulación de acto jurídico y la causa está a cargo del juez del fuero civil Juan Pereira. De acuerdo a los datos, el valor real de la casa supera los US$ 700.000 y la venta entre hermanos fue concretada solamente por G. 200 millones. El extranjero tenía como única intención la de despojar de todos los bienes a su expareja, con quien tuvo una hija.
La violencia sufrida por Aguilar Olmedo fue descubierta cuando su hija que entonces tenía 7 años reveló todo a su abuela que vive en la Argentina. De inmediato se procedió con la denuncia y la mujer fue rescatada a través de un grupo integrado por policías y funcionarios del Ministerio Público.