A finales del mes de octubre el Gobierno argentino comunicó la autorización de las embarcaciones remolcadoras para el cruce transversal fronterizo entre Domingo Martínez de Irala (Paraguay) y Puerto Libertad (Argentina). Con esto se tendrá el tránsito fluvial regular en el río Paraná, para el paso de vehículos y personas. La población iralense está expectante a la habilitación que se da luego de más de 30 años de gestiones.
La semana pasada se largó el remolcador al río desde Presidente Franco y en estos días deben hacer lo mismo con la balsa, hasta que llegue a Domingo Martínez de Irala. La empresa concesionaria para el servicio es Macuco Ecoaventura y Navegación S.A., que hace meses estaba con los trámites de matriculación de la embarcación “AFS 1” y “Rainha Irala”.
“Ahora ya se tiene todos los documentos, la Marina Mercante Paraguaya ya había autorizado, ya se tienen todos los elementos y está todo en condiciones, creo que este lunes o el martes se debe largar la balsa al rio, hasta Domingo Martínez de Irala, luego ya se verá la presencia de las autoridades regionales y nacionales para su habilitación oficial”, indicó Alberto Almada, poblador del distrito.
El morador recordó que en la época de Pascual Ramírez al frente de la intendencia, todos los trámites relacionados a la balsa cesaron, pues el mismo es poblador de Puerto Ita Vera, una población costera dentro del distrito y con un servicio de balsa en el centro urbano, por lo que no sería favorable para la economía de su comunidad.
El intendente Derlis Benegas, explicó que el servicio de balsa es un sueño antiguo en la comunidad y significó que contribuirá para reducir el tránsito sobre el puente internacional para llegar a la Argentina, incluso al territorio brasileño. Las vías de acceso a Domingo Martínez de Irala están totalmente asfaltadas y eso es una ventaja para llegar al distrito ubicado 77 km de Ciudad del Este.
UNA MEJORÍA COMERCIAL
La habilitación de la balsa será sinónimo de una actividad comercial mucho más dinámica, contribuyendo para la mejoría de la economía del distrito y la generación de fuentes de trabajo. El paso fronterizo con el territorio argentino se hizo siempre en lanchas y embarcaciones precarias e irregulares.
La balsa que debe entrar en operación tiene capacidad para 160 personas, 32 vehículos pequeños y 12 carretas. La empresa encargada del servicio es paraguaya y pertenece al grupo brasileño Macuco Safari. En cuanto a la inversión, hasta ahora ronda los USD 3 millones, sin descartar más acciones para reforzar el servicio.
Diariamente unas 50 personas cruzan el río Paraná en embarcaciones pequeñas, cantidad que debe triplicarse una vez que comience a operar la nueva balsa. Del lado argentino se podrá acceder a las ciudades de Puerto Libertad, El Dorado, Wanda, Puerto Esperanza y otros, que tienen movimiento industrial, agrícola y comercial, sumado a Puerto Iguazú, que tiene al turismo como fuerte de su economía.
Al respecto, Alberto Almada indicó que el paso por el río es de 10 minutos y el trayecto hasta Ciudad del Este es de 30 a 45 minutos, lo que contribuirá para un impacto positivo en las comunidades del sur, invitando también a otras inversiones a lo largo del corredor de exportación.